Lo que empezó en el club de robótica de la escuela, hace varios años, terminó convirtiéndose en un desarrollo tecnológico que hoy despierta el interés de productores, técnicos y empresas del agro.
En el pasillo central del Congreso CREA en Tecnópolis, Nehemías Vecino, de 18 años, y Gustavo Martín, de 17, mostraban un prototipo armado con caños, cables y un pequeño panel solar.

A cada rato se acercaba alguien a preguntarles qué era esa estructura y ellos respondían con entusiasmo, casi como si disfrutaran repetir una y otra vez, la explicación: “
Es un freatímetro automatizado, mide el nivel de la napa freática en tiempo real y envía alertas por mensaje de texto o a través de una página web”
. Sirve para tomar decisiones sobre los cultivos por sembrar como también para estar atentos a riegos de inundaciones.

El germen de la idea surgió en 2017, cuando la Escuela Técnica fundó su club de robótica. Cada sábado, los estudiantes se reunían para armar prototipos y participar en la Liga Nacional de Robótica. Con el tiempo, lo aprendido en esas competencias se trasladó a proyectos con impacto social.




